Mostrando entradas con la etiqueta amigos de Miguel. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta amigos de Miguel. Mostrar todas las entradas

lunes, 1 de noviembre de 2021

Exposición "ANDÉS & AUGE: AMISTAD Y MEMORIA"

Exposición

Andés & Auge: Amistad y Memoria

INAUGURACIÓN
Jueves 4 de noviembre a las 19.30 h.
Espacio Ronda Madrid.
Del 4-23 de noviembre, 2021.

Visitas
Lunes a domingo. 10:00-14:00 y 17:00-21:00. 





sábado, 27 de mayo de 2017

Cuadernos (VI)


Miguel Ángel Andés
Página 9 del cuaderno nº 3 "Diario de pintor".

Página 9 del cuaderno nº3 "Diario de pintor"
Madrid, 1981. Serie "Muchachas", muchacha bailarina (1)
Dedicado a la psicóloga Pilar Alonso
Tinta sobre papel, 16x21 cm


Contacto: amarneciendo@gmail.com

sábado, 11 de marzo de 2017

Mastabas, luces y sombras

Miguel Ángel Andés para Amarneciendo


Ya hemos contado que nuestra mayor fuente de información de la primera época como actor (artista) de Miguel Ángel Andés es su (nuestro) amigo Guillermo Álvarez. En estos años que llevamos embarcados en este proyecto hemos publicado alguna que otra foto más que no pertenecen al álbum personal de Miki, que es el apelativo con el que casi todos los "mastabas" le recuerdan. Esta preciosa composición es una de las imágenes de aquella época que Guillermo nos ha cedido para Amarneciendo. Debía de correr el año 1969 y nuestro artista se había forjado ya una corta trayectoria como actor, tanto cinematográfica como dramática. Gracias una vez más, Guillermo.

Fotografía: Álbum personal de Guillermo Álvarez

Contacto: amarneciendo@gmail.com

sábado, 12 de noviembre de 2016

Abîme Lumière (XXIX)


 XXIX

¡Cogerte de la mano
y conducirte...

(en un arrebatar el secreto
al extendido infinito
esperadizo)


Poesía: Miguel Ángel Andés, Abismaluz (1971), primeras poesías.
Traducción al francés : Teresa Escudero para Amarneciendo. 

Dibujo: Miguel Ángel Andés, tinta sobre cartulina, 1974.
Colección particular. 


Contacto: amarneciendo@gmail.com

domingo, 9 de octubre de 2016

Abîme Lumière (XXVIII)



 XXVIII

viviría
abismaluz parado de tus besos
hasta aquel domingo de célula  



Poesía: Miguel Ángel Andés, Abismaluz (1971), primeras poesías.
Traducción al francés : Teresa Escudero para Amarneciendo. 

Óleo: Miguel Ángel Andés, técnica mixta sobre tabla, 1976.
Donado por Octavio Colis para Amarneciendo



Contacto: amarneciendo@gmail.com

sábado, 1 de octubre de 2016

Abîme Lumière (XXVII)




 XXVII

ven a mi pulso de mi pulso,
rutina de alba te espero
perpetua de ti misma
múltiple de mí en todo


 

Poesía: Miguel Ángel Andés, Abismaluz (1971), primeras poesías.
Traducción al francés : Teresa Escudero para Amarneciendo. 

Dibujo: Miguel Ángel Andés, tinta sobre cartulina, 1974.
Colección particular. 


Contacto: amarneciendo@gmail.com

sábado, 13 de agosto de 2016

Miguel y Octavio Colis


Óleo s/tabla 21,9cm x 31,6 cm 1976

Desde que comenzamos con este proyecto de la mano de nuestro artista Miguel Ángel Andés, hace ya tres años, todo ha sido descubrir, aprender mucho y disfrutar del Arte, Pintura y Literatura, especialmente.  Como ya ha comentado en posts previos mi amigo y compañero en este blog, Luis, seguimos investigando sobre la vida de Miguel y de quienes fueron sus amigos. Poco a poco los vamos conociendo y tejiendo una red imaginaria con su vida, su arte, su poesía... En este camino hemos tenido la suerte de contactar con muchos: Guillermo, Cruz, María Jesús, Antonio, Rafael, Teresa, Justo..., y últimamente con Octavio.

Octavio Colis es pintor, escritor y actor de teatro muy conocido en mi tierra ya que, aunque lleva muchos años viviendo en Madrid, nació en Logroño. Tuve la oportunidad de conocerle el pasado 22 de abril en el Ateneo Riojano
en una entrega de premios, donde recibió el Premio de Narrativa de La Rioja por su novela "La luna sobre el río" y pude charlar un rato con él y conseguí que me firmara su novela. Aquel día me hubiese gustado mucho haber podido hablar más tranquilamente con un café, que me hubiera hablado de Miguel... 
Como digo últimamente,  mis sueños se cumplen y el otro día, en uno de sus viajes de paso por Logroño, pudimos tomarnos ese café,  pude escuchar de su voz todo lo que ya había leído en la Red  y más de sus tiempos de teatro junto a Miki en Goliardos y Mastabas, grupos a los que pertenecieron los dos.

Ha sido un encuentro precioso, que se me hizo muy muy corto.  Me emocionó el cariño con que Octavio Colis estuvo hablando de Miguel y me impresionó con todos esos recuerdos que atesoraba en su memoria. Pero quizás lo más  emocionante haya sido que me hiciera entrega de dos obras que Miguel le había regalado en los años 70, dos obras que había visto en fotos pero que al natural ganan en belleza. Octavio me dijo que se encontraba en una fase de "desprendimiento", que necesitaba "deshacerse" de muchos recuerdos y que sería un placer  que aceptáramos esta donación para nuestro proyecto, para que formen parte del legado de Miguel Ángel.

 
Técnica mixta 10,7 cm x 31,6 cm 1974


Miguel sigue siendo, en gran parte, un misterio todavía por desvelar, aunque cada día menos gracias a personas que tuvieron la suerte de compartir un trozo de sus vidas con él. Nadie muere del todo mientras haya alguien que le siga recordando. 




 
Contacto: amarneciendo@gmail.com

domingo, 8 de mayo de 2016

Miguel en Benidorm




Entre todos los documentos que conservamos de nuestra artista, la correspondencia no es el apartado más representativo, tan solo una pocas cartas y unas decenas de postales de amistades que le mandaban recuerdos desde distintos lugares de España, y del mundo, lugares donde parece que estaban pasando sus vacaciones y desde donde, en algún momento, se acordaban de su amigo Miguel Ángel Andés, pintor, poeta y bohemio, el cual se había quedado en Madrid. 



Al menos, así es como valoré todas esas postales que mi tío guardaba en una caja de metal y que luego mi abuela, la cual ya hemos contado que le sobrevivió, guardó a su vez en aquella librería añadiendo otros pequeños recuerdos, entre los que destaco, por poner dos ejemplos, la cartilla de escolaridad del colegio San Isidro de Miguel o su mismísimo documento de identidad.


El documento de hoy no pertenece a esa caja; sin embargo, está muy relacionado con ella. Hoy os traemos una carta de Miguel, perdón, no "de Miguel", no, sino una carta escrita por Miguel!!!  By Miguel!!! Y es que el trabajazo que están realizando nuestros amigos de la Asociación Oceánida (Cruz, María Jesús, Mercedes, Antonio y Guillermo) con todos los papeles encontrados en casa de las Ortego nos está regalando a todos preciosos descubrimientos. Y esta carta de Miguel a Esther y Carmina Ortego es uno de ellos.


La misiva en sí misma no es nada del otro mundo, acostumbrados como estamos ahora al intercambio constante de mensajes a través de las múltiples plataformas de Internet; pero a mí me ha encantado porque creo que su contenido refleja una visión de mi tío que me era insólita. Quiero decir que, al contrario de lo que he creído a veces, mi tío Miguel Ángel no estaba siempre dedicado a su arte y a sus paseos por Madrid, sino que también se iba de vacaciones; y no solo eso: esta carta creo que certifica algo que algunos no tenían del todo claro, esto es, que para Miguel Ángel Andés su dedicación al Arte fue su verdadero trabajo, del cual también era necesario hacer descansos. Al menos así quiero interpretar de esa frase del principio y esa otra de “Parece que los trabajos me van bien pero en detrimento del que me interesa: del que tú dispondrás tras la playa -- Pintar… pero también me viene bien esta pausa”. Hay que recordar que 1974 representa su época más prolífica, pictóricamente hablando. De la obra gráfica que conocemos de Andés, podemos afirmar que más de un veinte por ciento está firmada ese año… Y con todo, aquí le vemos de vuelta de pasar unos días en Moaña, lugar donde ya hemos constatado que fue invitado por las Ortego, y luego en Benidorm, emblemático destino vacacional durante décadas y en el que nuestro artista, como se puede también leer, tuvo tiempo para ir a ver exposiciones, ir al cine o incluso para jugar con un perro. 

Miguel con Carmina y Esther Ortego en Moaña (1974)

La carta, aunque corta, dice muchas más cosas y es evidente que Miguel escribe desde la confianza de una amistad ya entretejida. Hace gracia leerle comparar el clima y el paisaje de ambos parajes costeros. Es una carta entrañable que nos traslada a su época y que nos muestra otro lado humano de Miguel Ángel Andés, el cual muchos miembros de la familia desconocíamos.



Así pues, hoy no voy a enrollarme más en este post y prometo continuar en próximas entregas comentando algunas otras cuestiones a las que alude Miguel en esta misiva y que me han resultado la mar de interesantes.  

No se nos olvida dejaros la transcripción entera de la carta:

"Julio 74


Partí muy pronto después de vosotras. Por aquí trabajo y sólo hoy que me levanté muy temprano lo dedico a escribiroooos. esto no es tan tranquilo como aquello pero estos días algo con lluvia el mar tenía una (vista) muy briosa y de gris-azules que recordaba a Moaña. Por aquí exponía ese tal Cristo que no vi. Hacen exposiciones de muebles objetados: había un ojo de Man Ray. os enviaré momento. Yo me senté en el suelo con el cap tan preparado. Pues como en Madrid cuando las últimas (brasas). Parece que los trabajos me van bien pero en detrimento del que me interesa: del que tú dispondrás tras la playa -- Pintar… pero también me viene bien esta pausa. Os contaré que “Los” se resistía a salir de casa y se quejaba, pues, con el mismo carácter del adulto. Le dejaba en el suelo con la correa y buscaba los rincones con el miau-miau. Por fin se calmó porque Emma llevaba una cesta y allí se lo llevó a Torremolinos a golfear Sur-Este. El día 3 creo que por la pta. el Sol me pareció curioso que  (Julián Morros) me voceara para saludarme. Creo que con copichuela avec moi. bueno también yo, Carmina, os mando (cariños), playas, y sitios costeros que desconocía que son muy bonitos. Voy al cine también aunque la calidad no gobierna aquí: el otro día se les escapó una: “Un hombre de suerte” muy buena, de esas que sólo se ven en Europa. Un fuerte abrazo para cada una. Miki


Miguel Ángel Andés
Pasaje Santa Rita, 1 -41-B
Benidorm"



Fotografía de Moaña: Álbum personal  de Esther Ortego.
Fotografía de la caja: Álbum personal Amarneciendo.

Contacto: amarneciendo@gmail.com

domingo, 1 de mayo de 2016

Oceánida (IV)


amarneciendo oceanida carmina
Carmina Lorente y el mejor cuadro de Miki

La semana pasada estuvimos unos cuantos amigos de Miguel de visita en casa de Pepe Casal, otro gran amigo del cual ya hemos hablado en este blog. Fue un rato corto pero intenso. La Asociación Oceánida sigue su curso y este encuentro fue un paso más en el camino que nos hemos trazado, un camino cuyo fin principal es sacar del olvido y a la luz el arte olvidado de muchos artistas. Por cierto, aprovecho para informar de que ya tenemos dominio y un principio de web: www.oceanida.es

El caso es que Xosé Azar, el otro nombre de Pepe, y Carmina Lorente, su mujer, nos agasajaron con su enorme ternura y sus maravillosos recuerdos. Ya aquí arriba habéis podido ver a Carmina sujetando el que ella dice que es mejor cuadro de nuestro artista. Resalto esto porque allá por el año 98, cuando nos conocimos, creo recordar que usó las mismas palabras: "Luis, tengo en mi casa el mejor cuadro de Miki". Y en verdad que lo es, porque no hay mejor cosa en el arte que la connotación. Quiero decir que ella no es la única que considera poseer el mejor cuadro de Miguel Ángel Andés, sino que son varias las personas amigas que me han dicho lo mismo..., y no puedo encontrar más placer sabiendo que hay tanta gente que piensa lo mismo. Ya lo he dicho en alguna ocasión, y Rita lo puede confirmar: si este proyecto tiene alguna vez un final, será el día en que todos los cuadros y dibujos de Miguel, aquellos que todavía conserva la familia como herencia común, cuelguen de las paredes de las casas de gente que le admiraba cuando vivía, o que empezó a admirarle después. No creo que lleguemos nunca a crear una fundación con el legado de Miguel, pero ¿qué mejor fundación hay que esa que se sostiene sobre los hogares de tus amigos y admiradores?

El sábado pasado cuando nos despedíamos, Pepe me dijo que, siempre que me ha visto, percibe el espíritu de Miguel en algún lugar impreciso de mi persona; quizás mi mirada o mis andares o gestos, dijo. La genética es así de traicionera, sé que comparto algunos genes con mi tío. Sin embargo, por encima de eso, siempre he pensado que lo que más me une a él es su propia historia, su vida misma. Nunca dejo de estar impresionado por su figura bohemia y trasnochada, metida siempre en su mundo poético y pictórico, tan lejos y tan cerca de la realidad. Ese afán suyo por no trascender, por vivir su vida sin importarle nada de lo que pensasen los demás me sigue alucinando. En otra ocasión que nos juntamos hace unos pocos años, Pepe ya me adelantó algo de su propia interpretación de la vida y obra de Miguel. Sé que no coincide mucho con mi visión, pero también sé que tiene mucho más que contarme y, aunque ahora anda más concentrado en indagar en la obra de Esther Ortego, ya hemos quedado los tres en encontrar un hueco dentro de poco para hablar tranquilamente sobre Miki, aquel Miki que pintaba esas cabezas tan especiales, cabezas de seres cósmicos sobre fondos epiteliales. Tendréis noticias de ese próximo encuentro. ;-)

Termino este post con otra foto de la velada del otro día. La imagen de Guillermo y Pepe charlando con los ojos clavados en el móvil del primero me resulta de lo más sugerente. Y es que ahora podemos llevar todo el catálogo de un artista en el bolsillo. Internet y las tecnologías nos han llevado a nuevas formas de admirar el Arte. ¿A que están genial?

amarneciendo oceanida pepe casal
Dos mastabas disfrutando del arte


Contacto: amarneciendo@gmail.com

domingo, 21 de febrero de 2016

Para no olvidar



amarneciendo teresa escudero
Teresa y Miguel (1971)
 Esto es lo que escribí nada más terminar de leer el libro de poemas de Miqui, para no olvidar ("recordar, del latín ...., volver a pasar por el corazón". Eduardo Galeano.):

Leer estos poemas es encontrar a Miguel al ciento por cien y más. Por un lado, es reencontrarlo y también redescubrirlo. También estos poemas me sitúan en la misma época, con él sintiendo y pensando el universo y la dificultad de, como seres humanos, situarnos en la experiencia vital, que con el pulso de los veinte años nos resultaba tan complicado, tan grato y tan desolador por momentos, el intentar hacer sitio para nuestras intuiciones y afanes en el mundo, donde sufríamos de un país curtido, dominado por momias... Y él, Miguel con sus vértebras, sus ojos (azules), sus manos, tuvo la grandeza de la escasez, escasez por contención, de palabras, de gestos, exigiéndose un minimalismo vital tan sobrio y entregado como si lanzar su mirada como un rayo afilado y traspasar muros, capas y costras, que otros no ven, fuera el esfuerzo tan concentrado que él aceptaba que dispusiera de su energía total.

Para ello vivió, con total dedicación, para que veamos una parte, al menos, de lo que él vio... Y que otros continúen

Gracias, Miguel.


Texto: Teresa Escudero
Foto: Álbum personal de Teresa Escudero



Contacto: amarneciendo@gmail.com

sábado, 23 de enero de 2016

Oceánida (II)




Llevo mucho tiempo sin escribir en este blog. Vaya por delante mi agradecimiento enorme para Rita. Ya he contado cómo este proyecto Amarneciendo volvió a echar a andar, después de muchos años de olvido por mi parte, gracias a ella, pero ahora quiero decir que Rita Turza sigue siendo el motor que lo hace seguir en marcha. Tenemos una amiga común, Eva Zamora, que ha escrito cinco novelas en menos de dos años. Vaya también hoy aquí mi admiración hacia ella; su enorme capacidad creativa también me produce una cierta envidia (sana). Ya sabéis que mi espinita de siempre es escribir y este blog me trajo, por fin, la oportunidad de empezar a cultivar esa vocación... El verano pasado fue muy largo, y en los meses posteriores no he encontrado el sosiego necesario para volver a las páginas en blanco. El post de hoy quiere ser una simple declaración de intenciones dirigida, fundamentalmente, a mi alma gemela, la cual sé que tampoco ha pasado por sus mejores momentos, pero que ahí sigue sin desfallecer: pintando, escribiendo, creando..., y cuidando de los suyos. Gracias, Rita, una vez más. 

Obviamente, no puedo cerrar esta entrada sin explicar la foto que la encabeza y hacer una mención, también muy especial, al título y al post del fin de semana pasado. Oceánida, de momento, es otro germen de proyecto que no voy a desvelar todavía, pero que también creo que va a suponer un nuevo acicate para este mi deseo, enorme pero agazapado, de escribir y seguir aportando algo interesante a este mundo convulso de principios del siglo XXI, más preocupado por el fútbol, la economía, la política, el medio ambiente..., que por el arte y, más concretamente, por la poesía y la pintura.

El post del sábado pasado contenía un maravilloso poema de Cruz del Valle, pareja de Guillermo Álvarez, dos enormes personas que han sido un puntal importantísimo para que este proyecto de difundir el legado de mi tío Miguel Ángel Gordillo haya podido cuajar. En su poema, Cruz resume de forma magistral y preciosa una jornada, con comida y sobremesa incluidas, que Maite y yo compartimos con ellos dos, y con María Jesús Aragoneses, otra maravillosa mastaba, de la que también tenemos mucho pendiente que contar. También pude “conocer”, por fin, a Antonio Recamal, otro de los grandes amigos de mi tío en aquellos años de su juventud. Antonio se me ha descubierto también como otro personaje adorable al que no se puede dejar de admirar. Sólo voy a contar que el motivo de la reunión a la que alude Cruz no fue otro que agasajarnos a Maite y a mí con la visión de todo el trabajo que están realizando con el legado de Esther Ortego. Oceánida tiene que ver con ella, pero estoy seguro que va a tener también que ver con muchos (y muchas) más artistas de nuestro país, y del mundo entero, cuyas obras no han tenido los merecimientos y reconocimientos deseados en vida. Como se aprecia en la foto, solo basta con que alguien quiera agarrar el testigo, abrazar al artista por ambos lados... y acompañarle. El retrato que Maite y yo sujetamos es un precioso cuadro de Miguel, Miki para sus amigos, pintado por Esther hace muchos años. Sea esta foto una especie de promesa de que aquí vamos a seguir “por largo tiempo” escribiendo y disfrutando de la obra de nuestro artista...


Contacto: amarneciendo@gmail.com

sábado, 16 de enero de 2016

Oceánida


Y quería decir…


Y quería decir que los muertos circulaban entre nosotros
Y allí estuvo Esther, que nos convocaba
Y Miguel Ángel, que había sido el primero
Y Antonio, menos palabra, más presencia
en los libros, en las fotos, en los objetos….


Un grupo en torno a una mesa,
Comida, vino, conversación
Una casa que acoge
Una mujer que propone y permite


Cada uno con su nube, su bola de energía
Sus huecos, sus agujeros
Los dolores que se alojan impertérritos
En los costados de los orantes


Santo de la pastilla
Vial de psicoanálisis
Terapia de la vida
Origen del sentido


Y la voces van y vienen…


Si te alejas, los ves ahí
Sus cabezas inclinadas sobre el tablero de juego
Poniendo piezas, juntando palabras
Armando el puzzle
Imposible de la vida
Donde uno se refleja en el otro
Donde el otro creó surcos que transitamos


En la estela de Hjalmar
En el surco de Goteborg
Tras el misterio de la Mastaba
En las alas del mar
Con las manos sosteniendo palomas
Pelos ondulantes
Melenas frondosas
Delicados miembros
Entreteniendo el pucho
El libro
El recitado
El hilo tenue de la vida
El sentido tejido frágilmente
Con nuestra debilidad
Nuestro no saber
Nuestro querer…



10 de enero de 2016


Poema: Cruz del Valle
Fotografía: Álbum personal Amarneciendo



Contacto: amarneciendo@gmail.com

sábado, 26 de diciembre de 2015

Modismos frecuentes

Andés 75 para Amarneciendo


La tangente poética de Antonio Bestard

Modismos frecuentes


Texto: Miguel Ángel Andés
Dibujo: Miguel Ángel Andes, cedido para Amarneciendo  por los Amigos de Esther Ortego


Contacto: amarneciendo@gmail.com

sábado, 19 de diciembre de 2015

Modismos frecuentes

Lyon para Amarneciendo

Los intelectualismos de Lyon

Modismos frecuentes


Texto: Miguel Ángel Andés
Óleo: Miguel Ángel Andes, cedido para Amarneciendo por los Amigos de Esther Ortego.



Contacto: amarneciendo@gmail.com

domingo, 6 de diciembre de 2015

Pepe & Luis

Luis & Chino para Amarneciendo


El pasado día 14 de noviembre publicamos un texto escrito por uno de esos increíbles amigos de los primeros años de Miguel como artista, uno de esos amigos que siguen apareciendo (mejor diría: “amarneciendo”) en este maravilloso, tierno, tranquilo… y esperamos que largo camino que está siendo la difusión de su legado.


Días después, tuve el placer de conocerle en persona. En ese texto ya me había adelantado muchas ideas sobre su relación con Miki, que es como ya está claro que todos los mastabas llamaban a mi tío. Pepe Colodrón, el Chino o el Filipino, apodos con los que también parece claro que le recuerdan todos sus amigos de la época, es un personaje memorable, una persona fascinante a la que estuve encantado de escuchar durante casi dos horas, un rato que se me pasó volando. Es imposible hacer un resumen de la catarata de ideas y recuerdos que Pepe me transmitió, pero sí puedo afirmar que me impresionó mucho su visión del mundo, así como su memoria de Miguel. Le recordaba como un ser muy especial en aquellos últimos años de la década de los sesenta, un personaje al que reconoce que admiró... por su imagen “romántica” (usando sus propias palabras). Se acordaba, sobre todo, de los ojos de Miguel…, y de su mirada, una mirada que le colocaba muy por encima del resto de los actores, artistas y estudiantes, en su mayoría algo más jóvenes que nuestro artista, y que siguieron a Ángel Pastor en su proyecto “teatral”. Pepe llegó a afirmar que, para él y sin ninguna duda, Miki era el “favorito” de Ángel.


Pero ya he avisado que hoy no iba a resumir nuestra charla, puesto que, además, Pepe nos ha prometido a Rita y a mí que va a intentar escarbar en sus recuerdos de Miki y “regalarnos” más colaboraciones para nuestro blog. Como ya hemos dicho varias veces: este blog de Amarneciendo sigue estando abierto a todas aquellas personas que lo deseen, con la única condición de ser un/a admirador/a de la obra de Miguel Ángel Andés, o al menos haber tenido alguna relación con él o su obra.


Me despido explicando que la foto que encabeza este post de hoy nos la hicimos Pepe y yo al final de nuestro encuentro del otro día. Le sorprendió, pero también le gustó el “selfie”. :-)



Contacto: amarneciendo@gmail.com