Esta foto no tiene nada anotado por detrás, pero debió de ser tomada en junio del año 1977 en su estudio de la calle del Olivar, 1, tal como consta en otras fotos donde Miguel aparece vestido con la misma camisa delante de ese mismo mural de fondo. Y he de confesar que aquel espacio es mi primer recuerdo de mi tío. Y sé que es un mural porque yo conocí aquel estudio.
Quizás, fue aquel mismo año. Yo
tendría unos trece y me impresionó aquel enorme piso de la calle del
Olivar, en pleno barrio de Lavapiés, al que una mañana acudí con mis padres para no se qué. Recuerdo
cuadros por todas partes y paredes decoradas con frescos y dibujos
impresionantes. Había un enorme salón lleno de luz con una decoración y un mobiliario, ¿muy “hippy”, o muy singular para lo que yo había conocido hasta
entonces?, y con cuadros, pinturas, pinceles, libros, cuadernos, tablas, cajas, papeles..., por todas partes. En medio de aquel salón se levantaba una especie de muro, cubierto completamente de ese enorme mural que representaba un paisaje, donde predominaba el color azul, un paisaje que mezclaba naturaleza terrenal y cósmica y que invadía
todo el espacio de aquella preciosa habitación. Recuerdo que aquel mural me impactó profundamente y también
que aquel día alguien dijo (¿haber leído en la prensa?) que aquel año Miguel Ángel
se había convertido en el pintor más prolífico de Madrid, o de España,
que sus cuadros se contaban por cientos y que sus dibujos en cajas de cerillas y en billetes de metro eran la sensación artística del momento. No sé si fue una exageración, ni sé quién dijo semejante cosa, pero aquel enorme salón con su enorme mural se quedó
para siempre grabado en mi memoria.
Rita, al verla por primera vez, dijo que era una
foto extraña, que la pose de Miguel confunde, que no es natural, que al principio da la sensación de que estaba tumbado en
el suelo. Pero, enseguida, reconoció algunos motivos en el mural, similares a los de muchos otros cuadros y dibujos del artista. Y, por supuesto, le gustó su mirada serena, alegre..., y altiva, diría yo; y quizás orgullosa de su gran obra, su mural.
Hace poco he podido conocer alguna historia más sobre ese estudio de la calle Olivar y sobre ese mural, pero la compartiremos en futuros capítulos.
Contacto: amarneciendo@gmail.com
Genial, me encanto el relato de la cueva del artista, es muy pop la foto a lo Warhol- movimiento Beat, Truman Capote, como buen lector era crisol en la onda del lo mejor del s XX,no me resulto extraña la foto, ya os pondré algún ejemplo de Warhol, Pollock, Kerouac, el relato delicioso gracias...besos e+a=2.
ResponderEliminarGracias por tu comentario Eva. Estaremos encantados de que nos cuentes sobre Warhol , Pollock o Kerouac.
ResponderEliminarBesos.
http://odaaniepce.wordpress.com/2014/01/02/las-mil-caras-de-andy-warhol/
ResponderEliminarLas fotos de Warhol tiene muy similares una sentado..http://visiondelcine.com.ar/series/homenaje-a-andy-warhol-en-muchmusic/
Otra.besos..
http://culturacolectiva.com/curiosidades-sobre-jackson-pollock/ La de Pollock. Besos.
ResponderEliminarhttp://unameriendadelocos.wordpress.com/2013/06/18/la-unica-gente-que-me-interesa-es-la-que-esta-loca/ Kerouak....Sorry no se poner las fotos solas. Besos e+a=2.
ResponderEliminarhttp://descontexto.blogspot.com.es/2006/09/haikus-de-jack-kerouac.html .Kerouak en estado pleno... besos e+a=2.
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