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sábado, 6 de febrero de 2016

Agosto en Sésamo

Sésamo para Amarneciendo

Otra vez las paredes de la inhóspita Alfonsina.

Otra vez las PAREDES maniáticas del maniático SÉSAMO.

Otra vez la maniática presencia del penetrante existencialismo.

Otra vez el maniático Pepe Utrera con sus dedos renovados contra las renovadas Paredes de la Tauromaquia Española.

Lo más increíble de todo cuando os observo es que todavía existís una existencia que apenas creéis de estar seguros de pertenecer a ella.

¡Renovadas paredes de Sésamo de una crueldad de Tauromaquia Española!

Madrid, 1990


Poesía inédita: Miguel Ángel Andés

Contacto: amarneciendo@gmail.com

domingo, 24 de mayo de 2015

Justo Sotelo (II)


Justo y Luis para Amarneciendo
Justo Sotelo, feliz firmando libros.

Aquí me tenéis con Justo Sotelo. El martes pasado asistí a la presentación de su último libro, Cuentos de los viernes, una preciosa obra de relatos cortos, un género que, según él mismo dice, no es su favorito; que prefiere la novela, confiesa. Cuentos de los viernes, es una selección de algunos cuentos que Justo ha ido publicando en Internet durante este último año y medio. El libro narra una historia de amor entre dos personajes, Él y Ella, una pareja sin nombre, que terminan viviendo su amor a través de la Literatura. La acción va avanzando, al tiempo que la extensión de los microrrelatos va disminuyendo hasta llegar al final, donde la narración casi desaparece y los brevísimos textos parecen convertirse en poemas. El martes alguien le preguntó a Justo sobre este aspecto poético que tenía su libro y él respondió algo que me impactó. Vino a decir que lo suyo nunca había sido la poesía, a pesar de que escribía desde muy joven; además afirmó que en la actualidad abundaba una poesía que giraba en torno a la primera persona, y que a él le gustaba la poesía más universal, aquella que hablara de “nosotros”, pero no tanto de lo que sentimos como de lo que vivimos. Añadió que a él le encantaba escribir, pero que ante todo prefería vivir: juntarse con otras personas (y personajes?!)..., y hablar con ellas..., y de ellas. Y fue entonces cuando, dirigiéndose a mí, que me encontraba de pie al final de la sala de aquel abarrotado café, recordó a mi tío Miguel Ángel, su querido amigo de su época de las tertulias en Las Cuevas de Sésamo de hace ya más de veinte años y, también, personaje de su novela Las mentiras inexactas.

Café Este Oeste para Amarneciendo
Café Este Oeste, el martes pasado.

Hace justamente un año que escribí otra entrada en este blog sobre Justo Sotelo en la que expresaba el placer que supuso mi reencuentro con él y el redescubrimiento de su amistad con mi tío, de la admiración y el gran aprecio que Justo sentía por nuestro artista, poeta, pintor, pero también vividor. Quizás, este profesor (catedrático de Literatura y de Política Económica en la Complutense, además de novelista, ensayista y experto en Murakami..., y mucho más) tenga razón y no haya mejor cosa que vivir y compartir lo vivido con los demás. Aparte de su admiración por Miguel, lo que más me sorprende de Justo es su capacidad para convivir y compartir. En la dedicatoria de este Cuentos de los viernes, no hace más que confirmar esta visión de la Literatura: “A mis amigos, reales y virtuales, de las redes sociales”. Justo es un autor que claramente vive en su tiempo, y esta dedicatoria no puede sorprender.

De todos los relatos de este delicioso libro me quedo con este de la parte final, que transcribo íntegramente:
 

EL PERSONAJE
    No sabía cuál era su vida, hasta que alguien se la escribió.

Finalmente, el martes, pude hablar unos segundos con Justo mientras me firmaba un ejemplar de su obra (ya he dicho que no cabía ni un alfiler en aquel café), y quedamos en vernos pronto. Así pues, igual que hace un año, termino este post así:

To be continued...


Contacto: amarneciendo@gmail.com

sábado, 9 de mayo de 2015

El artista


Guitarra  Miguel para Amarneciendo

En los primeros años de su carrera artística, Miguel Ángel Andés se dedicó, principalmente, al cine y al teatro. Fue miembro de Los Goliardos, grupo alternativo, fundado en 1964 por Ángel Facio, por donde también pasaron decenas de profesionales, tales como Esperanza Abad, Miguel Alcobendas, Miguel Arribas, Ninón Dávalos, la cantautora Ana María Drack, el crítico Ángel Fernández Santos, el cineasta José Luis García Sánchez, María Jesús Leza, Carmen Maura y un largo etcétera. Antes de su primera disolución, el grupo sufrió una escisión que marcaría la vida del artista para siempre. El menos conocido Grupo Prado, o también llamado Mastabas, marcaría su carrera posterior y le llevarían a su ser más conocido, como poeta y pintor.

 
Su obra literaria

Tras su muerte, la mayor parte de su obra lírica fue publicada en un libro titulado Libros de poemas de Miguel Ángel Andés: Amarneciendo, Paradero, Abismaluz, Olandés. Grupo Prado de Poesía. Libro tercero. En este volumen se recogen la mayor parte de los poemas que escribió desde su juventud hasta 1978.

Libro tercero para Amarneciendo
Portada antología.

Abismaluz (IX)

anochezco célula errante
cerebro abandonado de tu amor 
mi efímera obstinación terrenal 
amarneciendo habernos sido



Su producción plástica


Sus primeros trabajos de finales de los sesenta muestran  un incipiente dibujante influenciado por diferentes corrientes y autores de su época y anteriores. Su obra sobre cuadernos de dibujo muestra a un artista obsesionado por la expresión lírica a través de las imágenes.

A principio de los años setenta, comienza a pintar con óleos y acrílicos en táblex de diversos tamaños. Este soporte de madera conglomerada fue en el que realizó casi toda su obra pictórica de aquella su década más fructífera. Llegó a ser considerado uno de los pintores más prolíficos del Madrid de aquellos años.

Los símbolos son los elementos principales de su obra gráfica, en la cual se pueden distinguir varias series muy distintas entre sí: senos, peces, cabezas, paisajes, cósmicos, durante hembra...

Dibujos

Posiblemente sus dibujos son lo mejor de su obra gráfica. El bolígrafo es su herramienta principal. Aparte del papel (hojas, servilletas, cartulina...) y de sus libretas o diarios de campo, Miguel Ángel Andés también dibujó en otros cuadernos de dibujo más convencionales. En formato apaisado y con hojas blancas unidas por espiral, llegó a completar decenas de ellos, entre los que destacan varios creados en Suecia durante el verano de 1975.


Gotemburgo 75 para Amarneciendo


Cuadernos de campo


Entre 1981 y 1993, completó ochenta y cuatro cuadernos de campo, que él mismo denominó Diarios de un pintor que escribe. Estos cuadernos de formato tradicional con hojas cuadriculadas unidas mediante espiral se conservan íntegramente y están siendo objeto de análisis y restauración, pues en ellos aparecen otros muchos poemas y escritos inéditos. En ellos también destaca la serie titulada Muchachas. Los más de dos mil dibujos y bocetos de bustos de mujeres jóvenes, con peinados y tocados distintos, se alternan con páginas dedicadas a otro tipo de dibujos, pensamientos y anotaciones de diversa índole.
 
cuaderno nº1 para Amarneciendo
 
Cajas de cerillas y otros soportes no convencionales

Tanto en su primera época como en la última, Miguel Ángel Andés alternó las tablas con otros soportes no convencionales: puertas de armario, maderas y otros objetos encontrados. Las cajas de cerillas son su obra más peculiar y original. A finales de los setenta la Fosforera Española emitió una serie de cajas con imágenes de cerámicas italianas, alemanas y orientales, figuras que él mismo adornó con sus habituales motivos prolongando su dibujo en la parte interior de la caja, la cual al abrirse mostraba un nuevo cuerpo “de gran belleza y curiosidad”, en palabras de un crítico de la época.


Cerillas para Amarneciendo

El laboratorio de poesía (sus casetes)

Los casetes y su magnetófono fueron el centro de su creatividad en sus últimos años. Amigos y familiares tuvimos la suerte de pasar algunos ratos con el artista en veladas llenas de conversaciones sobre temas artísticos y donde se alternaba la música y la lectura de poemas propios con otros de autores consagrados. Las cintas resultantes de aquellas veladas nos muestran al Miguel Ángel más maduro y tierno y conforman lo que él mismo llamó su Laboratorio de Poesía. La última de estas cintas, dedicada a su amigo Pepe Utrera, pianista en las conocidas Cuevas de Sésamo, la terminó de editar tan solo unos meses antes de morir.

Diario de poesía para Amarneciendo
22 junio 1993 para Amarneciendo



Contacto: amarneciendo@gmail.com

domingo, 26 de abril de 2015

Biografía de Miguel Ángel Andés


Familia para Amarneciendo
Familia Gordillo Andés (1955)

1948: Nace en Madrid el 9 de julio. Fue el quinto de siete hermanos. Su padre, Juan Gordillo, practicante en el barrio de Lavapiés, no supo comprender su vocación artística, lo cual determinó que abandonara el hogar familiar a la edad de dieciséis años. Su madre, Saturnina Andés, fue la persona que siempre supo comprenderle y que terminó acompañándole los últimos quince años de su vida.

Ensayos para Amarneciendo
Ensayos en el C.I.C.I. (1965)
1964: Lleva a cabo estudios en el C.I.C.I. y en la Escuela Oficial de Cinematografía. Paralelamente, ingresa en el Teatro Popular de Amigos de la UNESCO, donde participa en la escenificación de poemas y en trabajos colectivos del grupo.

1969: Durante dos años es miembro del grupo teatral “Los Goliardos” y colabora en los programas Becket y Woyzeck y va de gira por España representando dichas obras. Participa en el cortometraje El último día de la humanidad de Manuel Gutiérrez Aragón.

1970: Arranca su creación literaria con su primer poema dedicado al pintor Víctor Mira, al que seguirán varios poemas más dedicados, fundamentalmente, a pintores, que englobará bajo el título de Paradero. Su actividad literaria continúa centrada en la creación poética con las obras Olandés y Abismaluz.

Terremoto de Chile para Amarneciendo
Rodaje de El terremoto de Chile (1974)


1971-1974: En este periodo de tiempo, se acerca nuevamente al cine y participa en el documental de Joaquín Burón sobre el poeta Antonio Machado y trabaja como actor en el largometraje El terremoto de Chile de Luis Megino y Helma Sanders. Esta será su época dorada de su Estudio de la calle del Olivar, lugar donde pinta y escribe sin cesar. Allí dará sus primeros pasos como artista gráfico.


Gotemburgo para Amarneciendo
En Gotemburgo (1975)


1975: Viaja a Suecia, donde mantiene contacto con el mundo artístico de Gotemburgo, y tiene la oportunidad de mostrar parte de su obra.

1976: Participa en el libro Máscaras, palabras y poderes de Carlos Rodríguez Sanz, de rotundo éxito por la novedad de su montaje. Expone en la Casa de la Cultura de Valdepeñas.


cajas cerillas para Amarneciendo
Sus cajas en la exposición de 1998.

1977: Participa con diez pintores en una exposición colectiva de la Galería Seiquer de Madrid, del 9 al 21 de mayo. De esta misma época es su creación plástica más peculiar y conflictiva: su trabajo con cajas de cerillas, de las cuales expone una muestra en el Certamen de proyectos y modelos de cajas, que se celebra en la Galería Seiquer y, con posteridad, en la Galería de Luis.


Calle Olivar para Amarneciendo
En el estudio de la calle Olivar (1978)

1978: Realiza varias exposiciones en las Galerías Abril y Seiquer, y de manera permanente en su propio estudio de la Calle Olivar, en Madrid. Asimismo, presenta al Premio Adonais su poemario Amarneciendo.


Prado Poesía para Amarneciendo
Algunos miembros del Grupo Prado de Poesía (1984)

1980: Su actividad pictórica y poética sufre un importante parón creativo. No obstante, sigue dibujando y participando en tertulias literarias de varios círculos artísticos de Madrid. Se une al Grupo Prado de Poesía en el año 1985 y participa en la edición del primer libro de poemas del grupo.


1990: En esta década recupera el pulso pictórico llevando a cabo diversas obras en soportes de todo tipo, tales como lienzo, puertas de muebles, táblex, material en el que realizó casi toda su obra pictórica de los años 70. Inicia su laboratorio particular de poesía grabando cintas con sus amigos y repletas de sus poemas más queridos. Continúa su trabajo con dibujos en formato pequeño y sus cuadernos de campo, llenos de pensamientos, citas y bocetos.
 
Justo, Pepe y Miguel para Amarneciendo
Con Justo Sotelo y Pepe Utrera en las cuevas de Sésamo (1991)

1994: En agosto, comienza a sentir dolencias físicas, que se agravan a lo largo de ese año. Fallece el 27 de diciembre a la edad de 46 años.



Contacto: amarneciendo@gmail.com